Cuentos a la luz de las estrellas del Invierno

Está claro que los seres humanos nos apuntamos a un bombardeo si es para celebrar algo. Sobre todo, si hay comida y bebida, y no digamos si las luces y las risas pueden animarnos los días mas oscuros de invierno. Y en China, a pesar de su declarado ateísmo institucional y su confucianismo/budismo basal, les tira el rollo navideño. Los chinos navideños se dedican a disfrutar en familia, intercambiarse pequeños regalitos, salir con los amigos para ver películas o desgañitarse en el karaoke… Vamos a reservar un pedacito de nuestra programación navideña para un par de películas que, aunque no son «las típicas», bien pueden disfrutarse en familia después de haber paseado buscando las decoraciones festivas de la ciudad y haber devorado la cena de Nochebuena y la comida de Navidad, con los peques en casa dando por cul… interactuado animadamente con los adultos. Hala, dos películas que no son de las mejores, que no estamos para ponernos a hacer de crítico de cine, pero van a tenernos entretenidos a toda la familia por el puntito exótico

The Doll Bride: Si, es una película de terror (ligerita), pero los más peques ya se han dormido y los mayorcitos se niegan a tragarse una de esas ñoñerías de la productora cursi por excelencia (la productora por cable Hallmark Channel, la mismita de las postales). Apelaremos a la sección femenina de la casa, y defenderemos ver una peli sobre masculinidad tóxica, complicidad machista y tal y cual, Pascual. Si podéis esquivar la bandeja de horno dirigida a vuestra cabeza en vuelo rasante, marchando una de fantasmas

Con lo maja que va ella en su qipao bien ajustadito

Hace diez año, en un pueblo del interior, vivía una mujer tan guapa que todos los hombres la miraban con ojos libidinosos. La mujer, que era una “viuda de guerra” (su novio había muerto en el extranjero antes de la boda), era virtuosa y fiel, pero ¡ay los salvajes aldeanos! Se juntaron en un grupo perverso y la violaron en grupo. Las esposas de los susodichos, en vez de majar a palos a sus maridos, acusaron a la víctima de ser una arpía promiscua, y la destruyen con su maldad, acabando muerta

los muñecos diabólicos… ay, no es esa

Tras el crimen, todo el pueblo aplica la omertá. Diez años mas tarde, los hombres empiezan a morir violentamente en sus bodas o cuando están enredados con concubinas, y siempre aparece una muñeca vestida de novia en la escena. Maldición al canto, hala, por bestias

Y que no falte el grupo de teatro ambulante para hacer volatines, que le dan animación

La realización es muy irregular, como si hubieran reciclado de aquí y allá y a veces, hubieran conseguido buen material, y a veces, no. El guión va justito, justito, y con ideas bastante típicas. Han saqueado almacenes de guardarropía para vestir a los actores con lo que tenían de las series y películas de la época de la República de China (1912–1949), y lo que no llegaba lo han pillado de la tienda de todoacien. Al menos, han aprovechados los escenarios de “típico pueblo chino” que salen continuamente en producciones “históricas”. Cuando acabéis de verla, la tiráis a la papelera de reciclaje, y tan contentos, porque una vez la veréis, dos no.

Northeast Folktales: Los que quieren ser más originales, igual han dedicado un menú especial del día 25 copiado del Lejano Oriente, con cerdo asado (mi medio pomelo ha pedido codillo, no es tan extraño), dumplings (te los cambio por pasta rellena), rollitos de primavera (buen entrante, fácil y rápido) y arroz salteado. Esta vez no vamos a tener a los peques roques, así que ponemos una peli mas “de animalitos”. Con paisajes nevados, a tono con la estación

Táspate las orejas que se te quedan heladas. Si señor, libretita y paciencia

Un “escritor cultural” (¿un etnógrafo?) que viaja a un pueblecito muy, muy, muy rural para recopilar los antiguos relatos y cuentos de esa zona sobre Comadrejas Inmortales, demonios rata y Huli Jing, el Espíritu Zorro.

Con la puntería de una mosca en el pastel, justo cuando llega están realizando el funeral de uno de los vecinos alrededor del cual se han enredado los cuentos. O sea, historias ancestrales que pasan hoy mismo.
Anda mira, un cazador que se ha autoinvitado a la boda de los zorros

El guión no es original (bueno, quizás no lo es para los chinos de la zona, que conocen esos cuentos como nosotros los clásicos de Perrault y Grimm), pero los actores le dan vidilla a la historia. Os vais con buen sabor de boca, y para los nenes que están acampados en el salón de casa les repartís unos cuentos tradicionales de esos que en Europa nos hemos contado desde Esopo, y que afortunadamente Disney aun no ha metido sus uñas en ellos. Podéis presentarles los cuentos del Conde Lucanor, por ejemplo, o los de Calleja.

Esto es sincretismo y lo demás, puñetas

Que si, que en China hay un grupo pequeño (mucho mayor de lo que las autoridades quisieran) de cristianos que querrían celebrar la Navidad a su aire. El Cristianismo llegó a China en la Alta Edad Media, y ya en el siglo VII, (durante la dinastía Tang) se fundó la Iglesia del Este. El catolicismo fue una de las religiones apoyadas por la dinastía Yuan (mogola), pero estuvo en alfileres hasta la llegada de los jesuitas en el s XVI. Posteriormente, fueron los misioneros protestantes los que fueron haciendo cuña, fundando iglesias chinas independientes. En 2018, el gobierno chino declare que había más de 44 millones de cristianos (38 millones de Protestantes y 6 millones de Católicos, quizás con algún gurpúsculo ortodoxo). Actualmente, los grupos que no quieren pasar por el aro del control del gobierno se escurren entre prohibiciones y censuras. Otro día, hablaremos del tema, pero hoy os dedicamos un villancico

Publicado por directoraymas

Apasionada por la fotografía. Mas de 40 años viendo cine de todo tipo y últimamente decidida a hacer sus incursiones en el asunto. Viajera siempre que puede, pudo y podrá. En la mesa lo mismo puede haber una tortilla de patatas que un wok de verduras o una selección de mezzes... Con semejantes antecedentes, solo podía organizar un blog ecléctico entre la curiosidad y el desparpajo

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