
Kingdom: que si tanta fama tienen, que si un rompetaquillas en Japón… pues hala, para deleite de mi medio pomelo, que supongo que le gustan mas este tipo de películas que las rarunas o de arte y espasmo (perdón, ensayo) que a veces le engaño para ver, busqué esta (de momento) trilogía de grandes espacios abiertos, aventuras, muuuuchas batallitas, muuuucha fantasía y una base histórica tirando a excusa. Total, para un finde de agua y viento que se preveía, mejor algo que anime el relax postpandrial. Que no falten las palomitas

Lo cual tienen guasa, porque estas producciones están localizadas en el tiempo y lugar de los Reinos Combatientes chinos. Empieza con dos chavales huérfanos de guerra, Xin (también sale como Shin en segun que traducciones) y Piao, que han sido convertidos en esclavos por un terrateniente en una miserable aldea en el reino de Qin. Explotados y maltratados, aun encuentran tiempo para sonar en convertirse en “el Gran General de los Cielos”, y todo el tiempo que consiguen raspar de sus múltiples tareas lo dedican a entrenar y practicar con espadas de madera que se han hecho ellos mismos. En ellas están, haciendo el cabra en el bosque, cuando se los topan unos tipos de ricas vestiduras y sospechosas intenciones (uno es un ministro, lo cual da muy mal rollo), que acaban comprando a Piao a su dueño y se lo llevan no se sabe a donde ni para que. Unos meses después, Piao, moribundo, vuelve a la aldea a escondidas y urge a Xin para que huya y vaya a otro pueblo. Por patas que sale el superviviente, y allí encuentra a un tipo joven que es la viva imagen de su amigo fallecido, y después de un “amistoso intercambio de opiniones” resulta ser Ying Zheng (en según que traducciones lo veréis como Eisei) el verdadero Rey de Qin. El pobre Piao había sido reclutado como su doble de cuerpo, y mortalmente herido en una lucha por el trono. Lo cual como que le sienta fatal a Xin, pero después de una bronca con el rey por ser el origen del problema decide hacer una tregua y colaborar con el rey para derrocar a su medio hermano Cheng Jiao (que se había sentado en el trono y concluido que “es bueno ser rey”).

Objetivo conseguido: ya tenemos en el trono a un rey que mola mas que el anterior, y que parece tener un objetivo mucho mas elevado que limitarse a calentar el asiento, porque aspira a finiquitar la incesante guerra de una vez por todas, unificando el Reino. Por el camino conoce gente, hace amigos y aliados, se hace adulto… Hasta aquí, la primera película, que sigue bastante fielmente el manga

Xin comienza su vida militar como soldado de Qin y va ascendiendo poco a poco en el escalafón (bueno, mas bien a toda velocidad porque es un chico listo, valiente y esforzado, méritos propios) y pasa a comandante. El protagonista continúa con su ideal de convertirse en el “General mas grande del Mundo”, y de paso ayudar al Rey Zheng a conseguir su sueño de unificar toda China

En la tercera película (Kingdom 3: la Llama del Destino), es el reino de Zhao el que ataca Qin. A estas alturas ya me he perdido el asunto de quien ataca a quien, y me limito a disfrutar los grandes escenarios, los planos generales de batallitas y tal. Ofrecen mas información sobre los orígenes de Eisei y el general Okhi, a ver si vamos captando cómo han llegado a donde han llegado, y dejan el camino preparado para la cuarta entrega (Kingdom 4: el Regreso del Gran General), que esperan será en Julio de 2024, mostrando cómo Xin se dirige al castillo del general Okhi a entrenar, estudiar y espabilar.

La fotografía es muy buena, las escenas de lucha bien coreografiadas, la interpretación…. Buehhhhhh… aceptable (buena para ser escuela japonesa, que parecen teleñecos), la historia repetitiva (pero es lo que hay, se pegaban el día batallando, lo asombroso es que llegara alguien vivo para continuar la especie), y para animarla ya en el manga metieron personajes llamativos,

A Kento Yamazaki, el actor principal, le colgaron la etiqueta flower guy, o sea chico mono de comedia romántica, pero aparte de trabajar mucho ya había hecho pinitos antes en series y pelis de terror, y visto lo bien que ha funcionado por lo visto tiene en lista de estreno alguna interesantes (me la apunto, que el manga me mola), que ya sabemos que en Japón les mola eso de “desde el manga al anime y de ahí a la live movie”. Vale, en esta el personaje es muy teleñeco, con esa chulería de dibujo animado, y a veces hasta se nos atraganta. No tanto como otros, claro… Ryo Yoshizawa hacienda de Eisei es mucho mas aceptable, y el actor tiene el mismo recorrido: niño guapo que va buscando papeles mas oscuros. Pero ¡Que le vamos a hacer!, los personajes y la trama no dan pie para cosas sutiles

La historia del manga está centrada en una interpretación muy personal del periodo histórico chino denominado Reinos Combatientes, un periodo de la historia de China que comenzó en el siglo v a. C. y que acabó en la unificación de China por la dinastía Qin en 221 a. C; concretamente, está centrada en las Guerras de Unificación Chinas. Vino precedido del periodo de las Primaveras y Otoños, que el historiador Mark Lewis definió como «Edad de las ciudades-Estados», cada una dominada por la familia de un señor (denominada como jia) que dominaba una región más o menos grande y acumulaba títulos. En cambio, en los Reinos Combatientes, los señores de la guerra regionales anexaron estados más pequeños a su alrededor y consolidaron su mandato. En el siglo III a. C., siete grandes estados habían alcanzado cierta prominencia. Estos Siete Reinos Combatientes (戰國七雄, Zhànguó Qīxióng, literalmente, «Los siete héroes entre los reinos combatientes») eran Qi (齊), Chu (楚), Yan (燕), Han (韓), Zhao (趙), Wei (魏) y Qin (秦). Además, los señores de la guerra, que aún se consideraban duques (公 gōng) del rey de la dinastía Zhou (que mandaba durante el periodo anterior), empezaron a llamarse a sí mismos reyes (王 wáng), para implicar el significado de que se tenían como iguales del rey de Zhou.

Proliferan los trabajos con el hierro en China, reemplazando al bronce como el metal dominante usado en la maquinaria de guerra, y los estados en la frontera levantan murallas para protegerse de los invasores nómadas que fueron precursoras de la Gran Muralla China. A diferencia del periodo de las Primaveras y Otoños, la mayoría de los ejércitos en el periodo de los Reinos Combatientes, hacían un uso combinado de la infantería y caballería, y los carros fueron cayendo en desuso progresivamente. Como filosofías y religiones, aparecen el confucianismo, el taoísmo, el legismo y el moísmo.

Al principio de este período, el estado de Jin era el que llevaba la voz cantante, pero se va deteriorando , las luchas por el poder y las alianzas con otros estados para conseguir como-sea-y-pase-lo-que-pase sentarse en el trono (uy como me suena esto) acaba destruyendo la fortaleza de Jin, que acaba repartido en manos de distintas facciones: Han, Zhao y Wei. A partir de ahí todos se tiran al cuello de todos. Alianzas y traiciones se suceden. En el 316 a. C., Qin conquista el área del reino Shu, y sigue merendándose cada uno de los otros estados, (acabando en el 221 a. C. con Qi), completando así la unificación de China e iniciando la dinastía Qin.



Que manera de ver batallitas y no se cansan, todo el dia sin parar, luego que si quieren la paz para a continuación proclamar la guerra de nuevo, claro como hay tanto chino que gastar, la peli va de eso, no esperamos otra cosa como zombis o dinosaurios, pero en fin ya se les ocurrira
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